¿Por qué la lectura es la gran aliada de la memoria?

Aunque la ciencia y la medicina han avanzado muchísimo en las últimas décadas, empezar a pensar en cuidarse YA es algo vital.

¿Y qué seríamos nosotros sin la memoria? Un tapiz en blanco esperando a ser pintado.

 En la memoria están nuestros recuerdos, los buenos y los malos momentos que nos hacen ser como somos. Y también muchas otras capacidades que nos permiten funcionar en el día a día.

Como los músculos de tu cuerpo, tu mente se beneficia enormemente de un buen ‘entrenamiento’. ¿Y a qué me refiero con entrenamiento? A algo que la estimule. Algo nuevo que se salga de tu rutina acostumbrada.

Sin embargo, hoy queremos hacer hincapié en una actividad que hacemos a diario y que es sumamente beneficiosa. Muchos, de hecho, quieren dedicarle más tiempo, pero se encuentran quizás con la falta de tiempo o motivación.

Hablamos de leer. De leer más.

 

Es una forma de ejercitar la imaginación, de abrir el intelecto y que requiere una mayor atención.

De acuerdo con Ken Pugh, presidente y director de investigación en Haskins Laboratories, “partes del cerebro que se han desarrollado para realizar otras funciones —como visión, lenguaje y aprendizaje asociativo— se interconectan de una forma específica para la lectura, lo que es un reto”.

En general, leer demanda que prestes atención y pongas tu mente a trabajar, además de exigir una mayor concentración que no ocurre mientras ves la tele. Es fácil estar frente al televisor mientras hablas con alguien, comes o incluso recoges un poco la habitación.

Sentarte con un libro, especialmente uno que suponga un reto estimulante, “nos fuerza a construir, a producir una narrativa, a imaginar,” según Maryanne Wolf, directora del Center of Reading and Language Research en la Universidad de Tutfs, Massachusetts. “Normalmente, cuando lees, tienes más tiempo para pensar. Leer te da acceso a un botón de pausa único para la comprensión y el conocimiento.”

Esto, según estudios publicados en la revista “Neurology”, es la última evidencia que demuestra que la lectura ralentiza el deterioro cognitivo en la vejez, independientemente de las enfermedades neurodegenerativas comunes relacionadas con la edad.

En resumen, la lectura da a nuestro cerebro un entrenamiento estimulante y necesario. Ejercita nuestra memoria, procesa y almacena activamente nueva información, lo que nos mantiene activos.

Y si no eres un gran aficionado a la lectura, aquí van un par de consejos:

  • Lee mientras esperas, en el metro, en el bus, en la sala de espera en el médico.
  • Únete a un grupo de lectura (en Facebook, por ejemplo) donde además puedas hablar de lo que estás leyendo actualmente.
  • Lee antes de irte a dormir. Esto ayuda a desconectar de la tecnología y además mejora el sueño.
  • Léele a tus hijos. Comparte con ellos tus historias favoritas.
  • Escoge un libro aleatorio de tu librería local que llame tu atención.
  • Busca qué libros leen tus actores favoritos. La mayoría les encanta compartirlos en sus páginas personales.

4 comentarios

pLYZtNMfcRs

pLYZtNMfcRs

NeagfbiUkuBHorpO

aZPDumKnRBtosJEA

aZPDumKnRBtosJEA

shuxSjHAzXaKg

hqQBGArdLmuNUaoe

hqQBGArdLmuNUaoe

QqVwcvjWfYZeX

OkmfiRNdXq

OkmfiRNdXq

AyxstqJVbWEFpl

Deja un comentario