Una novela gráfica llena de ternura que plasma con simpatía y cariño el amor absoluto que sentimos pornuestras abuelas.
Églantine y su abuela son inseparables. Cómplices en los buenos y en los malos momentos, tienen una relación muy especial y lo comparten todo: recuerdos de infancia, contundentes desayunos los fines de semana y, sobre todo, muchísimas risas. La nieta ha heredado el ácido sentido del humor de la abuela y disfruta cada momento que pasa al lado de la anciana, aunque a veces parezca que esta ha comenzado a perder un poco la cabeza...
Reseñas:
«Églantine Chesneau consigue dejarnos sin palabras y nos introduce en un universo donde los colores superan a las palabras y expresan sentimientos.»
LeFigaro
«Esta novela gráfica rezuma ternura. Para todos aquellos que tienen (o han tenido) la suerte de disfrutar de una abuela adorable.»
Télé Poche