Un libro que te hará recordar todos aquellos momentos dulces que pasaste con tu abuela.
Hay abuelas en todos los confines de la Tierra. Todos hemos conocido a una o a muchas, a las nuestras o a las de los demás.
Los más afortunados trotamos algunas tardes sobre las rodillas de una abuela Consiguelotodo o nos chupamos los dedos después de paladear un abrazo de chocolate de una abuela Repostera. Muchos sabemos que hay pocassensaciones comparables a la de quedarse dormidos en el regazo de una abuela Tejedora de cuentos o podemos presumir de haber visitado otros planetas a bordo de la mirada perdida de una abuela Lunática.
Un libro que te hará recordar todos aquellos momentos dulces que pasaste con tu abuela.
Hay abuelas en todos los confines de la Tierra. Todos hemos conocido a una o a muchas, a las nuestras o a las de los demás.
Los más afortunados trotamos algunas tardes sobre las rodillas de una abuela Consiguelotodo o nos chupamos los dedos después de paladear un abrazo de chocolate de una abuela Repostera. Muchos sabemos que hay pocassensaciones comparables a la de quedarse dormidos en el regazo de una abuela Tejedora de cuentos o podemos presumir de haber visitado otros planetas a bordo de la mirada perdida de una abuela Lunática.