Esta es la fatídica historia de amor de Bernabé, un gato rojizo triste
tímido libanés intolerante a la lactosa que tenías dos dueñas. Por las
mañanas, Bernabé, estaba al cuidado de Gertudis y por las tardes vivía
con Lucía. Hasta que un día de lluvia, mucha lluvia, cielo gris y gotas
de las más gordas todo cambió...
Imagínese que llueve, cielo gris, frío, huuuy qué frío, hay gotas, de
las gordas, gotazas, pobres tejas. ¿Se ha fijado en las tejas, en sus
tejas, en los colores de sus tejas? ¿Nooooo? ¿Siiiiiiii? ¿De qué color
las tejas? ¿Y se pasean gatitos como en las mías?
Allí están Georgia -abuela campesina que sabe cocinar ricas arepas- y
Natalia -nieta pecosa, de voz chillona-, cuando un golpe seco suena en
la ventana. Era a un gato mojado muerto rojo triste tímido libanés
intolerante a la lactosa. Era Bernabé, que había caído desplomado. Y de
esta forma comienza una fatídica historia de amor.