Monasterios budistas y templos dorados, hermosas playas de arena y aguas turquesas, extrañas formaciones rocosas e islas inmaculadas, pueblos selváticos envueltos en niebla y ciudades animadas, lugares únicos del patrimonio mundial y una variada gastronomía de la que enamorarse.
Monasterios budistas y templos dorados, hermosas playas de arena y aguas turquesas, extrañas formaciones rocosas e islas inmaculadas, pueblos selváticos envueltos en niebla y ciudades animadas, lugares únicos del patrimonio mundial y una variada gastronomía de la que enamorarse.